La Carta

Polo Norte, 10 de diciembre de 2011.

Querido Amigo:

                                   Me cuesta comenzar esta carta, que es un pedido, casi un grito desesperado. Si, yo. El que siempre las recibe, hoy esta escribiendo una.

                                  

Lo he hablado mucho con mis colaboradores, hasta con los mismísimos renos que tanta compañía me hacen, y llegue a la conclusión que soy merecedor de hacerte esta solicitud.

                                  

Tu bien sabes que me he portado muy bien a lo largo de tantísimos años: siempre había algún juguete en tu casa, aunque sea algo sencillito, todos los árboles tuvieron un presente para ti. Pues bien, es hora de que me devuelvas tantas atenciones: espero no lo tomes a mal, recibe esto como quizás el ultimo deseo de un viejo conocido que se la pasa regalando alegría a niños y adultos.

                                  

Recuerdo aquellas navidades lejos de casa…que difícil era sobrellevar esos momentos de soledad. Pero allí también estuve, haciéndote llegar algún que otro obsequio.

                                  

Esto ya parece un alegato. Discúlpame, es que debo sincerarme contigo: me da muchísima vergüenza estar pidiéndote algo a ti, que tanto has dado. Sucede que es más fuerte que yo.

                                  

Esta petición (con alto contenido de ruego y parecida a una suplica) se origina en una cantidad infinita de cartas que me han llegado desde todas las latitudes: todos me piden lo mismo. Y, como bien sabes, es mí deber concederles a los niños aquello que tanto desean (si es que se han portado bien, claro).

                                   Bueno, en realidad la cosa pasa más por mí. Si, es eso. Olvídate de las cartas. Hagamos de cuenta que nadie ha pedido esto que te estoy pidiendo. Porque este es el mi deseo, el deseo de alguien que nunca recibió un regalo, por la sencilla razón de que es el encargado de darlos.

                                  

Sebastian, Brujita de mi alma! Solo te pido seis meses más!!!!

                                  

Un fuerte abrazo, tu Amigo…

                                                                                                                                              Papa Noel.

7 Abrazos! Feliz Navidad!