“En la vida a veces es bueno emocionarse…
y este equipo me emociona”
A veces uno no encuentra las
palabras para describir ciertas cosas que pasan o mejor dicho que lo
atraviesan, que lo penetran sin pedir permiso, sin ni siquiera uno darse
cuenta.
Ayer por la noche, en un
reconocido bar de nuestra querida ciudad hubo algo de eso: se generó un clima
que solo quienes formamos parte de la familia de Estudiantes de La Plata podemos entender…o en
realidad, podemos disfrutar, sentir o vivir, ya que no creo que seamos
totalmente concientes de lo que genera ser parte de Estudiantes de La Plata.
A lo largo del encuentro (excusa
perfecta para escuchar melodías bellísimas, bien pinchas y festejar el
cumpleaños de un amigo como lo es Iván, aunque casi no nos conozcamos)
transitamos por diferentes estadíos: la música nos llevo a nuestra infancia,
nos trajo a nuestros seres queridos que partieron vaya a saber uno a donde, nos
hizo ponernos de pie para cantar nuestro hermoso himno, nos invito a
sorprendernos con la llegada de muchos de los muchachos que nos devolvieron la
gloria…
Todo esto combinado con rica
comida, buena bebida y la hermosa compañía de un grupo de gente absolutamente
diferente en una infinidad de cosas: uno es peronista, el otro radical, al otro
ni le hablen de política; aquel sabe y mucho de diseño grafico, el otro enseña
el saque y la bolea, hay un dúo que maneja la informática como los dioses, una
vende ropa y por allá alguno intenta explicar lo que es un asiento contable…un
espectro amplísimo de personas que comparte (y esto es lo mas importante) algo que
los moviliza a unirse, y es el sentimiento incomparable e innegociable de amor por
Estudiantes de La Plata.
Pero hubo un momento que marco a todos y cada
uno de los allí presentes…un momento en donde hasta el mas desentendido supo
que debía callarse y escuchar…escuchar para recordar aquellos destellos
infinitos de felicidad que el protagonista de esa canción nos ha regalado…
Por un instante me creí solo en
ese sentimiento mezclado de tristeza y melancolía…me vasto levantar la mirada
para saber que, desde el peronista hasta el aspirante a contador, todos
transitaban el mismo camino: “yo te vi
llorar en cada vuelta…”…y ese maldito pero recurrente sentimiento egoísta
de pensar “no te vayas, quedate un rato mas,
si la rompiste el domingo, dejate de joder, sin vos no podemos”…
Esto es Estudiantes de La Plata : compartir las
alegrías y también los momentos difíciles, unirnos para festejar y unirnos mas
para agradecerte todo eso que hiciste, hacés y seguirás haciendo por nuestro
Estudiantes de La Plata …
Será difícil escribir allá cuando
el maldito tiempo marque 18 del ultimo mes del año, por lo pronto ya comenzamos
a agradecerte, aunque no nos alcanzarían todas las vidas del mundo…
Lo dijo el Cholo el año de tu regreso, cuando nos estabas
por devolver la gloria: “En la vida a
veces es bueno emocionarse…y este equipo me emociona”…ayer por la noche
empezamos a despedirte y a emocionarnos…
7 Abrazos!
PD: “Mil gracias bruja por tantas alegrías…este soldado se
arrodilla ante vos”
Le hice honor al titulo y me emocioné! Es hermoso lo que escribiste Manu!
ResponderBorrarLe agradezco a D11OS, a Ivan y a ustedes (la banda twittera) por hacerla magica y llena de Mistica!
GRACIAS BRUJA!!!!
Muy bueno Manu, todos disfrutamos esa noche y no lo podías contar de mejor manera...
ResponderBorrarUn abrazo!